Autor: Gonzalo Núñez
Hipocresía y nada más
El miércoles 27 de octubre, día del censo nacional, los medios de comunicación informan sobre el deceso del ex presidente Néstor Kirchner, ocurrido en su casa del Calafate. Eran las 9:30 de la mañana, más de uno habrá pensado que la noticia era otra maniobra del multimedios Clarín, pero no, el hecho era cierto. El ex presidente sufrió dos paros cardíacos, antes de morir. Desde TN se informaba sobre la muerte: “Murió Néstor Kirchner”, y como un vuelco del discurso del grupo, los cronistas exaltaban la figura de Kirchner. Desde otros medios se continuaba la misma lógica, un gran manto de hipocresía cubría las pantallas televisivas. Un desfile de personajes opinaban. Los informes sobre Kirchner no tardaron en aparecer.
Desde Canal 7, la “televisión pública”, la cobertura del suceso tenía una marcada impronta de angustia y congoja, el canal ofrecía en su pantalla el análisis de diferentes politólogos y personalidades del espectáculo que como era de esperarse resaltaron la figura del ex presidente. Por su parte, TN continuaba el análisis de la situación de otro modo. Centraba su discurso en una pregunta básica: ¿Cómo sigue el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner? La imagen que se reflejaba desde el multimedios era de que el gobierno perdía no sólo a un dirigente sino fuerza política. Sin embargo, Canal 7 y canal 9 contraatacaban el discurso que quería imponer el Grupo de Magneto, colocando el eje de la discusión en una visión más optimista del futuro argentino, asegurando que “el modelo iniciado en 2003 continuará, nadie lo detendrá”. Así, el zapping televisivo mostraba el pesimismo hipócrita por un lado y el optimismo enlutado por otro.
Desde ambos sectores de poder la disputa tuvo su lugar en el orden del discurso, en dar cada uno por su lado su balance acerca del ex presidente, su gobierno.
En este país la historia se repite en varios casos, el artista muerto es condecorado con algún premio, el deportista sin medallas recibe honores cuando ya no está en este mundo, como sucedió con Alfonsín los ex presidentes pasan a ocupar el lugar de grandes conductores y sus políticas económicas son meros desatinos, que como muestra la historia, los pueblos sufrieron. Desde los medios de comunicación a partir el 27 de octubre iniciaron una escalada poco usual, desde el multimedios se apelaba a la incertidumbre, los medios gubernamentales como Canal 7, por ejemplo parecían canonizar una figura política de las clases dominantes. Remarcaban el discurso antineoliberal que supuestamente representaba Kirchner pero omitiendo que fue precisamente quien continuó algunas de las políticas de los noventa. Muestra de ello son la continúa extranjerización de la tierra, el pago de deuda externa, la expoliación de los recursos nacionales, la burocracia sindical ayer menemista hoy devenida progresista, y un escuálido presupuesto para salud, educación y trabajo, o las privatizaciones de empresas públicas en Santa Cruz apoyando las medidas de entrega nacional. Tal vez, en estos puntos los medios del Grupo y los canales al servicio del gobierno no se diferencian ya que un hubo mención al respecto. Cada uno llevó agua para su molino.
En este país la historia se repite en varios casos, el artista muerto es condecorado con algún premio, el deportista sin medallas recibe honores cuando ya no está en este mundo, como sucedió con Alfonsín los ex presidentes pasan a ocupar el lugar de grandes conductores y sus políticas económicas son meros desatinos, que como muestra la historia, los pueblos sufrieron. Desde los medios de comunicación a partir el 27 de octubre iniciaron una escalada poco usual, desde el multimedios se apelaba a la incertidumbre, los medios gubernamentales como Canal 7, por ejemplo parecían canonizar una figura política de las clases dominantes. Remarcaban el discurso antineoliberal que supuestamente representaba Kirchner pero omitiendo que fue precisamente quien continuó algunas de las políticas de los noventa. Muestra de ello son la continúa extranjerización de la tierra, el pago de deuda externa, la expoliación de los recursos nacionales, la burocracia sindical ayer menemista hoy devenida progresista, y un escuálido presupuesto para salud, educación y trabajo, o las privatizaciones de empresas públicas en Santa Cruz apoyando las medidas de entrega nacional. Tal vez, en estos puntos los medios del Grupo y los canales al servicio del gobierno no se diferencian ya que un hubo mención al respecto. Cada uno llevó agua para su molino.
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http://www.youtube.com/watch?v=F2F_AouD4SI
http://www.youtube.com/watch?v=hClO8VgalX0
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